Por: Fernando Torres Mejía
En las mañanas cuando vamos rumbo al trabajo, o estamos tomándonos un café, escuchamos la radio y vamos cambiando el dial y escuchamos los comentarios de los diferentes “periodistas” o “panelistas”, de igual forma ojeamos los periódicos y nos detenemos cuando hay algo de interés y en especial durante estas semanas de vandalismo, por lo cual tengo que decirlo con toda claridad y franqueza, nuestros medios de comunicación también se contagiaron y se volvieron “vándalos y terroristas “de los micrófonos y de los medios escrito. Que bueno sería que los periodistas colombianos o extranjeros dejaran la comodidad de sus escritorios y fueran a los sitios mal llamados de resistencia, no solo en el día, si no en las madrugadas para que observaran a los «jóvenes «, embriagados, fumando marihuana, consumiendo narcóticos, aspirando pegante y tomaran las imágenes gráficas que un civil no puede hacer porque es agredido de inmediato, sitios de donde mantienen secuestrados a los habitantes de un sector o incluso toda una ciudad. Que fácil es atacar por los medios a la ciudadanía que sale a defender su patrimonio, la infraestructura y a la misma policía que no “puede” hacerlo por que ahora se los prohibieron con una justicia politizada que los despojo de sus derechos a defenderse, que fácil es agredir a través de unos micrófonos en la comodidad de unas cabinas de radio o incluso desde sus casas por que hoy con el COVID ya muchos trabajan y hacen periodismo desde los amplios estudios o salas de sus residencias, donde escasamente se escucha el canto de los pajaritos donde hasta ahora no les han bloqueado o perturbado su tranquilidad y no han experimentado el sentirse secuestrados, amenazados y vandalizados por ningún Joven que de manera “pacifica” los ha abordado ni mucho menos han tenido que soportar las chivas y camionetas llenas de indígenas de la minga atacando sus hogares como si lo hemos vivido una parte de nosotros los caleños.
El 28 de mayo, un mes de haberse iniciado las protestas, la turba de “jóvenes” y terroristas pretendieron ingresar y vandalizar el sector de Ciudad Jardín en Cali, pero de la misma forma como fueron expulsados los “pacíficos” miembros de la minga a comienzos del mes de mayo, la ciudadanía decidió nuevamente defenderse, proteger su infraestructura, sus negocios, su patrimonio y claro proteger a los policías que iban a ser objeto de ataques e incluso y como ya es costumbre en estas hordas de delincuentes, les tiraron bombas incendiarias con el propósito de quemarlos vivos, a lo que muchos periodistas y columnistas, salieron a defender a los “pobres” e indefensos vándalos, con el argumento que eran manifestantes y que por el contrario la población civil se extralimito tomando la justicia por sus propias manos, que esto era atentar contra la libre expresión y que tanto los que dispararon poniendo en riesgo la vida de estos angelitos, como los miembros de la policía debían ser judicializados, por que tenían que evitar que los civiles hicieran uso de la fuerza.
Entonces me pregunto, ¿tenían los policías que respetar el derecho de los civiles a defenderse y además debían haberlos capturado y encerrarlos? De igual manera no deja de sorprender las declaraciones del general Murillo director de la SIJIN quien también se fue en contra de nuestros policías acusándolos de un mal procedimiento, no general se equivoca y de que manera, usted le corresponde ser coherente y hacer cumplir el orden, pero también le toca defender a los miembros de la institución, protegerlos y valorar su entrega, ellos cada día arriesgan su vida para protegernos. Por otra parte, sorprende como en este país ser pillo paga, pues a raíz de los hechos antes mencionados, casi que de inmediato, tres oficiales, un intendente y 4 patrulleros son investigados por el delito de PREVARICATO y OMISION, en un CAI donde solo habían 10 policías para defenderse de una turba de vándalos, donde con su accionar causaron daños por mas de $4.000 millones y para rematar como un gesto “noble” de las autoridades competentes, suspendieron a dos patrulleros por estos hechos, sin evaluar el daño que les están causando ya que estos tienen familia e hijos que sostener y que además, tienen que buscar abogados para que los defienda, con el atenuante que ni siquiera tienen para comer, por eso general le comparto este mensaje de un ciudadano que hizo esta publicación redes sociales.
“Si tocas mi negocio, barrio, edificio, conjunto, casa, apartamento, patrimonio o pones un dedo en mi familia y el estado no alcance a protegerme, me defenderé con todas mis fuerza y recursos disponible. Por que tu derecho a protestar jamás pasar encima de mi derecho a defenderme”
Invito a los medios de comunicación que están defendiendo las formas de protesta y también al general para que se enteren un poco mas de lo que realmente esta sucediendo y nos ayuden a entender:
• ¿A quien realmente benefician estos actos vandálicos?
• ¿Quien los esta financiando?
• Porque llegan señoras mayores de 40-50 años a prepararles alimentos en ollas comunales
• Porque estos lugares de bloqueos se han convertido en sitios de inseguridad, consumo de drogas, abusos etc.
• Porque estos jóvenes los despiertan con grabaciones a todo volumen de marchas y canciones socialistas, comunistas o alusivas al ELN o a las FARC.
• Porque llegan vehículos con alimentos, licores, radios, drogas, armas no convencionales como las puntillas clavadas en tubos, dinero en efectivo.
Pero como si todo esto no fuera suficiente, ahora el alcalde de Cali da vía libre a los bloqueos mediante la expedición del decreto 4112.010.20.0304 del 31 de mayo de 2021 logrando exponer mas a la ciudad y dejándola a merced del vandalismo y aunque el secretario de seguridad y justicia de Cali, salga a dar explicaciones, sobre el verdadero alcance de este decreto, la ciudadanía en general lo interpreta como un legalización de los bloqueos, de hecho en uno de estos sitios el día 04/06/2021 uno de estos “jóvenes pacíficos” sale con el documento en la mano y anuncia que ¿volvemos a bloquear este sitio y la autoridad no nos puede decir que no, ni mucho menos intervenir, por que estamos avalados por el decreto que firmamos con el alcalde”. SEÑORES MEDIOS DE COMUNICACIÓN SEAN COHERENTES E IMPARCIALES