El presidente Gustavo Petro ha instruido al comandante del Ejército para que no reciba a los testigos clave de la corrupción en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo (UNGRD) en ninguna unidad militar, a pesar de que ya firmaron preacuerdos con la Fiscalía que les permitiría estar recluidos en un sitio que garantice su seguridad y su vida.
El presidente Gustavo Petro ha ordenado al comandante del Ejército, el general Emilio Cardozo, que no permita la reclusión de Olmedo López y Sneyder Pinilla en ninguna guarnición militar. Esta decisión se produce a pesar de que ambos han firmado preacuerdos con la Fiscalía y han recibido amenazas contra sus vidas debido a su colaboración con la justicia.
La Fiscalía había solicitado que López y Pinilla fueran recluidos en instalaciones militares por razones de seguridad. Sin embargo, el general Cardozo expresó su negativa a esta solicitud, argumentando que la decisión final sobre el lugar de reclusión corresponde al juez de control de garantías.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, indicó que acatarán lo que disponga la justicia en este caso.
López y Pinilla son testigos clave en la investigación de un escándalo de corrupción en la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). La Fiscalía ha revelado que López, exdirector de la UNGRD, organizó un equipo para direccionar contratos y crear una “empresa criminal” dentro de la entidad Totalmente saqueada para sobornar congresistas a cambio de sus votos en el congreso de la República.