Por: Fernando Torres Mejía
Si hay un instrumento al servicio de los intereses políticos y que ha funcionado para alcanzar el poder, es la de incluir el odio en los discursos. El odio es una herramienta política que se considera poco óptima para el rendimiento político y poco beneficiosa para la gobernanza, pero si no se alimenta el odio, los políticos tendrían una tarea difícil para conquistar al ciudadano de a pie. Algo similar ocurre con las ONGs, que siembran odio y descontento hacia las instituciones, para justificar su presencia en nuestro país.
En el programa “El país de los jóvenes” quede sorprendido por el liderazgo y las virtudes de los participantes, pero llama la atención la ingenuidad, la ignorancia y la falta de conocer la historia, especialmente los que participaron en el debate “al candidato de la otra campaña”, quien los enredo y los envolvió con cantos de sirena y poso como una víctima culpando al estado y al gobierno de estar en contra de su campaña.
Campaña de odio
• El estado y el gobierno lo persiguieron y lo intentaron sacar de la alcaldía de Bogotá, por el hecho de gobernar bien y afectar los intereses de personas poderosas que financian un partido importante.
• Para evadir los cuestionamientos por corrupción, se escuda manifestando que como no están con Uribe, la fiscalía les abren procesos, los medios de comunicación publican en primera página que están siendo investigados, pero al final ninguno resulta condenado, porque esto solo corresponde a estrategias de sus enemigos políticos.
• El gobierno tiene como proyecto matar jóvenes porque protestan como ocurrió en el paro nacional, pero además los 6.402 jóvenes que según la justicia, mato el jefe del actual gobierno en otro gobierno, él personalmente no, sino el tipo de política de seguridad que una mayoría de colombianos decidió que se volviera gobierno.
• La política de seguridad parte de una especie de paranoia conspiratoria, de pensar que hay un enemigo interno, donde matar y dar de bajas es el indicador, donde antes eran las FARC, ahora son la primera línea. Esa política de seguridad solo tiene un indicador, la muerte.
• El resultado cuando se despliega la fuerza publica en una manifestación, sea ante la perspectiva de ascender en una carrera militar o policial, es matar, lo han obligado los políticos, no nace de ellos mismos, creen que esa es la seguridad y eso ha conducido a fosas comunes, genocidios y masacres que se cometen diario.
• Los gobernantes continúan con mentalidad de esclavista, son herederos físicos de los esclavistas, por eso llego el momento del poder negro con la vicepresidenta y eso no debe asustar, es simplemente darle poder a la población afro y negra, para que en los territorios exista autonomía real.
• Sobre el reordenamiento territorial o por regiones no se ha podido porque la clase política no lo permite porque quiere tener poblaciones sojuzgadas.
• El pacífico litoral necesita autonomía, todos los países de la región son ricos, la única que está en la pobreza extrema es la Colombiana, porque ahí se ubicó la población negra, y es ahí donde se demuestra la enorme incapacidad de la elite que gobierna desde Bogotá desde hace dos siglos, blanca ella, descendiente de los esclavistas que no comprenden ni siquiera el mundo.
• El problema de San Andrés parte de intereses económicos, y de politiqueros que te ocupan las playas, como el caso de la vicepresidenta, que no tuvo ningún empacho en decir que el marido cementó la playa para hacer un hotel donde cuenta con agua potable, mientras que los raizales no.
• Nuestros principales ingresos provienen del petróleo, la cocaína y el carbón, entonces ¿por qué podemos tener tubos que atraviesan el país hasta el mar para llevar petróleo y no tenemos un tubo para llevar agua a la guajira desde la sierra nevada?
Promesas y sueños inviables
• Capital crédito para emprender, permitiría que cinco odontólogos se unan para abrir un consultorio e iniciar un emprendimiento sin tener que emplearse.
• En la Universidad del Pacífico en el Choco crear la carrera “Ciencias de la investigación de la biodiversidad de las selvas” para que así los habitantes del Choco no tengan que venirse a Bogotá a manejar un taxi o irse al exterior a lavar platos.
• Establecer en San Andrés, la universidad del caribe donde se puede enseñar en diferentes idiomas, y que todos los consulados y embajadas deberían ser encargadas a los habitantes de esta isla. También crear la escuela de marinería, donde se puedan hacer barcos, comerciar con las demás islas como en el pasado.
• Vamos a pasar de $4 billones a $14 billones en infraestructura para las universidades.
Al terminar el programa, los jóvenes lo aplaudieron y lo buscaron para abrazarlo y tomarse “selfies” y no se detuvieron a pensar, por lo menos, que nuevas carreras universitarias, como las prometidas, solo aumentara el indicador de desempleo y profesionales con actividades distintas a la que le dedicaron 5 años de carrera, como tampoco le cuestionaron de donde saldrá la plata para incrementar $10 billones para la infraestructura universitaria. Entonces, como no concluir que solamente hay Odio y promesas inviables en la estrategia del candidato de la otra campaña.