Muere de un infarto testigo contra Daniel Coronell

No habían pasado más de tres semanas desde que Germán Castaño Valencia declaró en contra de Daniel Coronell para que un infarto lo sorprendiera en su residencia y acabará con su vida. Venía enfermo, decían algunos vecinos; otros que desde la declaración contra el poderoso empresario de los medios suscrita en la notaría 29 de Bogotá el 4 de marzo de 2019 su vida cambió radicalmente.

Un familiar le contó a El Expediente que él sabía que había tocado a un pez gordo, a un hombre temerario.

Germán Castaño fue trabajador de confianza del narco Justo Pastor Perafán extraditado a Estados Unidos y a quien le ayudó a edificar su organización criminal fungiendo como representante legal de distintas empresas del conglomerado del que según él Coronell era el relacionista público y recibía beneficios económicos.

Cómo se sabe Daniel Coronell terminó ganándose la licitación de su noticiero en el gobierno de César Gaviria de quién siempre ha sido cercano gracias al apoyo económico y a sociedades con un grupo de personas -muchas de ellas aún vigentes en la vida nacional- entre ellas Pastor Perafán.

Ver: NTC, Coronell y Perafán

En su declaración, publicada por El Expediente, Germán Castaño desmiente ‘categoricamente’ a Coronell y le recuerda sus múltiples encuentros con Perafán en las instalaciones de la empresa Imagen & Sonido y le dice que negar que conoció a Perafán en los años noventa es querer ‘tapar el sol con un dedo’. Sus declaraciones serían aportadas en los procesos que se llevan contra Coronell en Estados Unidos por los que se ha declarado, nuevamente, perseguido y en riesgo de ser silenciado.

 

 

 

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