Por: El Expediente
El pasado 19 de octubre El Expediente denunció en exclusiva cómo el senador Armando Benedetti y su fórmula a la Cámara de Representantes Efraín Torres estructuraron un millonario negocio desde el Congreso gracias a la aprobación de la Ley 1539 de 2012 mediante la cual se obliga a 250 mil vigilantes del país a pagar $100 mil pesos anuales para un examen de aptitud psicofísica con una única firma habilitada para practicarlo: Simetric SA cuyo propietario es el empresario Euclides Torres padre del representante Efraín Torres.
El articulo titulado ‘Investigación: Fiscalía indaga por corrupción entre el grupo de Armando Benedetti y una congresista del Centro Democrático’ relata cómo el senador Luis Fernando Velasco intentó tumbar ese monopolio pero se encontró con un posible hecho de corrupción que involucra a la Representante del Centro Democrático, Tatiana Cabello, quien habría ayudado a engavetar el proyecto de Velasco que acabaría con el negocio que montó el grupo político en cabeza de Armando Benedetti.
VER: Investigación: Fiscalía indaga por corrupción entre el grupo de Armando Benedetti y una congresista del Centro Democrático
En ese momento faltaba una prueba reina; la evidencia de la cercanía entre Benedetti y Euclides Torres y el lobby que ambos habrían ejercido ante el Palacio de Nariño a instancias del gobierno de Juan Manuel Santos del que el parlamentario de La U ha fungido como escudero desde el Congreso de la República. Benedetti y la Casa de Nariño no han respondido a un derecho de petición que les presentó el abogado Jaime Lombana en el cual les pregunta las razones por las cuales el senador y el empresario ingresaron el 5 de febrero de 2013 al despacho del entonces Secretario General de la Presidencia, Juan Mesa, actual embajador en Italia.
Jaime Lombana, quien presentó denuncia penal ante la Corte Suprema contra Armando Benedetti solicitando que se investiguen este y otros posibles actos de corrupción, radicó el derecho de petición el pasado 24 de octubre basado en información de primera mano y a la fecha no ha recibido una respuesta de parte de la Presidencia de la República que desmienta o ratifique esta visita y explique las razones por las cuales el parlamentario y empresario estaban en Casa de Nariño el mismo día y a la misma hora.
La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia ya ordenó a hacer un seguimiento a los bienes y propiedades del senador Benedetti pero no se ha pronunciado específicamente ante esta y otras denuncias que pesan contra el político barranquillero que durante toda su vida pública ha logrado hacerle el esguince a las investigaciones por corrupción y parapolítica.