Cómo todo empresario y contratista del estado Daniel Coronell tiene negocios en juego en esta contienda electoral. En su calidad de propietario de la productora NTC es contratista de distintas entidades del gobierno y accionista del Canal Uno junto a Yamid Amat y el expresidente Cesar Gaviria, favorecidos por el gobierno Santos que les asignó, como únicos propónentes y sin mediar licitación alguna, la señal del canal.
Calcando la formula mediante la cual se vendió Isagén a un único propónente, el gobierno Santos le asignó contra viento y marea la licencia del canal al consorcio ‘Unión Promesa de Sociedad futura plurar comunicaciones SAS’ conformado por NTC de Daniel Coronell, CM& de Yamid Amat y el expresidente Cesar Gaviria y la firma RTI de Patricio Wills.
El proceso de adjudicación realizado en noviembre de 2016 ha sido criticado no solo por los contradictores del empresario periodista y del gobierno sino también por expertos en televisión y en contratación pública. Los resultados de rating no son buenos y el canal no ha logrado despegar con fuerza y está muy por debajo de RCN y Caracol TV.
Álvaro Uribe puso sonar el tema en la campaña. A través de un trino, con el que Coronell y Noticias Uno dicen que amenaza la libertad de prensa, el expresidente advirtió que en un gobierno de Iván Duque los procesos de adjudicación serán hechos con transparencia.
Daniel Coronel, político y contratista de Santos, tiene pánico y con razón; un Gbno de Iván Duque manejará con transparencia las concesiones de televisión
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) 18 de marzo de 2018
Quizá lo mismo harían Germán Vargas, Sergio Fajardo, Gustavo Petro o Iván Duque. Todos candidatos con mayor intención de voto que el candidato que aparentemente le gusta a Coronell, el jefe negociador con las Farc, Humberto De La Calle.
El 19 de noviembre de 2017 el periodista registró la consulta del Partido Liberal en la que Humberto De La Calle derrotó a Juan Fernando Cristo. A Coronell no le llamó la atención el costo de la consulta, $40 mil millones. Le llamó la atención el grato resultado: » 740 mil votos no son pocos. El candidato liberal @DeLaCalleHum arranca con una victoria electoral probada y un aire nuevo de viabilidad»
740 mil votos no son pocos. El candidato liberal @DeLaCalleHum arranca con una victoria electoral probada y un aire nuevo de viabilidad.
— Daniel Coronell (@DCoronell) 20 de noviembre de 2017
Una hipótesis: @DeLaCalleHum le ganaría una consulta interpartidista a @petrogustavo, solo porque cabalgaría en el multitudinario antipetrismo. Sin embargo sería difícil que se quitara de encima el aroma de «castrochavismo» que le dejaría esa alianza.
— Daniel Coronell (@DCoronell) 18 de enero de 2018
Conozco a Humberto de la Calle desde 1990. No siempre he estado de acuerdo con él. Esta noche se reveló cómo un gigante.
— Daniel Coronell (@DCoronell) 25 de agosto de 2016
De la Calle renunció a su ejercicio profesional para intentar una negociación de paz. No creo que se deje seducir por codicia política.
— Daniel Coronell (@DCoronell) 1 de junio de 2015
Interceptaciones, hackeo y creación de cuentas falsas para desinformar y desacreditar. El blanco es ahora Humberto de la Calle
— Daniel Coronell (@DCoronell) 27 de septiembre de 2014
En paralelo a su simpatía frente a De La Calle y sin advertirle a sus lectores su doble intención Coronell comenzó a publicar una serie de columnas sin mayores elementos periodísticos o nuevos hechos pero sí con altas pretensiones de capitalizar golpes de opinión en contra de Sergio Fajardo, Germán Vargas, Álvaro Uribe – Iván Duque, y Gustavo Petro.
El 27 de enero se fue contra Germán Vargas. Su columna ‘El pantano de Vargas’ es una suerte de análisis electoral en el que concluye: ‘Nada garantiza que los caciques que se elegirán en marzo se partan el brazo por él (Vargas Lleras) en la primera vuelta. Quizás para ese momento ya sea un intermediario innecesario’. Conjeturas con las que le hace creer a sus lectores que el exvicepresidente está por fuera del juego.
El 10 de marzo cargó contra Sergio Fajardo. En una columna titulada ‘Perder es cuestión de método’ lo presentó cómo un candidato ya sin ninguna opción de llegar a la presidencia: »Como los barcos en problemas, Fajardo ha empezado a hacer agua a babor y a estribor. Por la izquierda por cuenta de que muchos votantes de sus aliados no sienten en él a alguien suficientemente firme para enfrentar todo aquello que Uribe representa. Por la derecha, porque el crecimiento de Petro asusta a los que veían a Fajardo como una alternativa para acabar con la polarización pero que le temen más al fantasma del castrochavismo, figura hábilmente vendida por la extrema derecha. Semejante seguidilla de errores, sumada a los modestos resultados que probablemente obtenga en las elecciones parlamentarias del domingo, debería sumir al candidato en el subsuelo de la intención de voto».
‘Petrificados’ es la más reciente de esta serie de columnas contra los rivales de De La Calle. Se refiere a los resultados de Gustavo Petro en la consulta del pasado 11 de marzo. Según su análisis, con cerca de tres millones de votos, Petro está sepultado electoralmente: » El ganador neto del liderazgo de Petro en las encuestas es hoy el candidato de Álvaro Uribe. Como sería prácticamente cualquier otro candidato que se enfrentara con Petro en un escenario de segunda vuelta. Todos, con la única excepción de Piedad Córdoba, terminarían derrotándolo porque –justa o injustamente– Petro encarna los temores de la mayoría de los votantes colombianos de que el país termine convertido en otra Venezuela».
Una columna con mismo titulo y argumentos que ya habían sido expuestos por el exministro Rudolf Hommes en su columna titulada ‘Petrificados’ publicada en el en El Tiempo el pasado 25 de febrero.
Contra el expresidente Uribe, jefe político del candidato del Centro Democrático Iván Duque, ha publicado cerca de 250 columnas. Las ultimas, previas a alas elecciones, ‘refritos’ como el caso de la trágica muerte de Pedro Juan Moreno. Un noticia falsas basada en un supuesto correo del narcotraficante Don Berna que lo desmintió públicamente.
Atención: «Don Berna» desmiente a @DCoronell frente a sus acusaciones contra @AlvaroUribeVel por la trágica muerte de Pedro Juan Moreno. #FakeNews pic.twitter.com/5sL3zdAdR0
— Gustavo Rugeles (@GustavoRugeles) 14 de febrero de 2018
Nadie puede negar el agradecimiento de Daniel Coronell con el expresidente Cesar Gaviria que durante su gobierno le otorgó la licencia para su noticiero NTC y con el actual gobierno Santos que le entregó un canal a dedo. El columnista se ha hecho moler desde su twitter y su columna en Revista Semana en contra de los rivales de De La Calle pero no ha escrito una sola letra sobre la derrota liberal en el Congreso, de la desdibujada de su candidato en la campaña. Tampoco le ha interesado aprovechar el equipo investigativo que tiene en Colombia y en Estados Unidos en Univisión para averiguar sobre los negocios de De La Calle con los Nule, con Odebrecht, con Avianca cuando ya ejercía como negociador de paz. Siquiera para preguntarle como terminó de candidato cuando había dicho mil veces que no iba a utilizar el proceso de paz para promover una aspiración personal.
Una eventual candidatura de Humberto de la Calle sería el tiro de gracia a la maltrecha credibilidad del proceso de paz con las FARC.
— Daniel Coronell (@DCoronell) 1 de junio de 2015
