Por: Fernando Torres Mejía
A causado revuelo estas afirmaciones del señor Presidente de Argentina Javier Milei, en clara alusión a Petro, pero no entendemos cuál es el escándalo si es que está diciendo o afirmando la verdad que todos sabemos, o ¿es que ahora se va a desconocer que el 22 de diciembre de 1989, se expidió la Ley 77 de 1989, que faculto conceder indultos en desarrollo de procesos de paz y que el 7 de julio de 1992 la Ley 7ª de 1992 ordena la cesación de cualquier procedimiento penal respecto de las personas beneficiadas por los indultos?, y que se originaron por el acuerdo con el grupo narcoterrorista M-19, del cual Petro hizo parte.
¿Será que la toma de la Embajada de República Dominicana (1980), el secuestro de Álvaro Gómez Hurtado (1988), la toma del Palacio de Justicia (1985), todo esto, por cuenta del M-19 y muchos otros, no se pueden catalogar como delitos terroristas protagonizados por comunistas?
Es posible que la gran mayoría de jóvenes desconozcan estos hechos y que se sientan ofendidos, pero en parte no se pueden “culpar”, pues no les gusta leer, y menos la historia, ellos están en el mundo del “TikTok”, de los videojuegos, además en las escuelas y colegios durante un poco más de dos décadas se dejó de enseñar la cátedra de historia y aunque ahora se está tratando de volver a dictar, el camino ha sido más difícil de lo que se esperaba.
Los delitos cometidos por el M-19, tuvo como protagonistas a muchos de los que hoy quieren que se les trate como expresidentes, exalcaldes, exgobernadores y no como exasesinos, exsecuestradores, exvioladores, exreclutadores y eso sí que es imposible, por eso, si Petro está ofendido por los comentarios de Milei, también deberían sentirse así los demás que hicieron parte de este grupo terrorista como Navarro Wolf, Rossemberg Pabón, Vera Grave la que ahora junto con Otti Patiño fungen como negociadores con sus pares del ELN.
Así mismo hubo otros que ya no están en este mundo terrenal como Carlos Pizarro Leongómez, el padre de las dos congresistas María José y María del Mar, que se ufanan de ser las hijas de este comandante, quien les dejó como legado ser uno de los más grandes delincuentes de la historia de este país, aunque lo quieran negar.
Es que se pretende que nos acostumbremos a indultar y olvidar que ser bandido paga y que no se les puede recordar el pasado porque es delito y un insulto, pero además que no recordemos la historia, que no se cuente que Petro hizo parte del M-19, grupo que quemó vivos a magistrados, a muchos inocentes y que gracias a la determinación del expresidente Betancourt y algunos de sus generales lograron combatir y recuperar esa toma cobarde, aunque a muchos de ellos los están juzgando y condenando por el hecho de imponer la autoridad y hacer respetar la Constitución, igual sucede con el Secretariado de las FARC, por cuenta de Juan Manuel Santos quien los premio, les dio curules y de paso convirtió a Colombia en la cuna de la delincuencia, el terrorismo y el más grande lavadero de activos por cuenta de su obsesión de un Nobel.
La hipocresía o el cinismo es algo que carcome el cerebro de la mayoría de los políticos de este país, ahora Iván Name presidente del Senado manifiesta “repudio el irrespeto por parte del Presidente de la Nación Argentina hacia nuestro presidente, que representa al pueblo colombiano”, y se rasga las vestiduras defendiendo lo indefendible cuando hasta la semana pasada no hacían, sino insultarse mutuamente, aunque claro podría uno pensar que es la expresión del cinismo en su máxima expresión. De paso aprovecho para dejar claro que dudo mucho que la gran mayoría de colombianos estén de acuerdo con que Petro nos representa.
Recordemos que fue Petro quien empezó las peleas y los insultos contra los presidentes Nayib Bukele, Javier Milei, y con el primer ministro Benjamín Netanyahu, y cuando estos señores reaccionan algunos políticos y congresistas se ofenden e incluso salen con comunicados donde nos piden rodear al “presidente” quien fue elegido democráticamente, como si las dudas por los dineros del narcotráfico y la violación de los topes no fueran suficiente para pensar que este personaje fue elegido de forma fraudulenta.
¿Por qué tenemos que tapar el sol con un dedo y tratar de ocultar una verdad que no tiene discusión o es que cuando Milei dice “Gustavo Petro es una plaga letal para los propios colombianos”, es mentira, no es esa la razón por la que hoy está como está nuestro país?, o cuando dice “mucho no se puede esperar de alguien que era un asesino terrorista”, ¿eso no es lo mismo que la gran mayoría de colombianos está pensando?, o cuando NayibBukele dice «Petro, Lo peor que le ha pasado a Colombia y a Latinoamérica», ¿no es esto verdad?
Al final nos queda claro que ningún político colombiano ha tenido el coraje y la valentía de Javier Milei para decirle Petro públicamente que es un Asesino, terrorista y comunista.