Piedecuesta es uno de los 87 municipios del Departamento de Santander y hace parte del área metropolitana de Bucaramanga a tan solo 15 kilómetros de distancia de la capital santandereana.
Con 246 años de historia de la “Villa de San Carlos Borromeo del Pie de la Cuesta”; este municipio sufre hoy una de las peores desdichas sociales, económicas y de salubridad de sus últimos tiempos.
Ya se cumplen seis (6) días sin el suministro de agua potable para 180 mil habitantes que residen en esta municipalidad; paradójicamente rica en recursos hídricos (Río Manco, Oro, Hato, diversas quebradas y nacimientos de agua en las veredas San Isidro, Santa Rita y La Nevera).
Los astros no le favorecieron a Piedecuesta y la noche del viernes 4 de noviembre del presente, se juntaron el infortunio de las condiciones climáticas con la desidia de la administración pública, más desidia que condiciones climáticas.
Piedecuesta cuenta con la Planta de Tratamiento de Agua Potable “La Colina”, que hace más de 30 años fue construida cuando tan solo tenía aproximadamente 20 mil habitantes; hoy demográficamente la población ha crecido en un 900 % y esta planta ha llegado a su capacidad máxima.
En condiciones normales de gestión y planeación pública, cuando ocurren fenómenos naturales como lluvias torrenciales se hace necesario el cierre de las compuertas de la bocatoma cuando aumenta la turbiedad para así evitar la sedimentación en la bocatoma y la Planta de Tratamiento de Agua Potable.
Igualmente, en condiciones obvias de gestión y planeación pública, se debe realizar un monitoreo las 24 horas del día, máxime cuando se conoce de antemano las condiciones climáticas pronosticadas por las autoridades meteorológicas y científicas; y tener un Plan de Contingencia para superar la emergencia probablemente en tres (3) horas o máximo cinco (5); como lo han superado administraciones anteriores y no de seis (6) días como va corrido en el gobierno del alcalde Mario José Carvajal Jaimes.
Un hecho insólito que solo ocurre en municipios donde la desidia es un pilar fundamental para gobernar; se dio en la Empresa de Servicios Públicos ESP “Piedecuestana”, encargada de la administración y funcionamiento de la Planta de Tratamiento de Agua Potable “La Colina”. Cristian Ricardo Medina Manosalva, Director Técnico y de Operaciones de la Piedecuestana, quien debía estar al frente de la emergencia para intentar superarla; prefirió estar por fuera de la ciudad y conociendo de la dramática tragedia por la que pasaba toda una ciudadanía; en Villavicencio disfrutaba del “Giro de Rigo” todo un fin de semana con puente festivo.
Garantizar el suministro de agua potable es una obligación de los mandatarios en Colombia, en Piedecuesta desde el gobierno de Jorge Armando Navas Granados, Ángel de Jesús Becerra Ayala y Danny Alexander Ramírez Rojas; se ha dado continuidad a un proceso de modernización de la Planta de Tratamiento de Agua Potable “La Colina”, pero extrañamente en el gobierno de Mario José Carvajal Jaimes, este proceso se silenció.
Se construyó la nueva “Bocatoma”, se realizó el cambio de celdas, encerramientos preventivos, se pasó de un abastecimiento de agua de 450 litros/segundo a 700 litros/segundo, se construyó el tanque de abastecimiento “Andalucía” sector sur; entre otras muchas acciones para garantizar el suministro de agua potable a los Piedecuestanos; que a pesar de las circunstancias adversas que también se presentaban, nunca afectaron tanto el bienestar ciudadano como hoy se está viviendo.
Se van a cumplir tres (3) años del gobierno “Una ciudad para la gente” de Mario José Carvajal Jaimes y la modernización de la Planta de Tratamiento de Agua Potable “La Colina” se estancó, como estancada esta Piedecuesta en estos seis (6) días.
Ni una sola obra para garantizar el suministro de agua potable le ha presentado “Carvajal Jaimes” a Piedecuesta, la vida normal de los Piedecuestanos está afectada, los comerciantes tienen pérdidas incalculables, los estudiantes no han podido ir a sus instituciones educativas, los problemas de orden y salud pública van en aumento.
13 mil millones quieren enterrar en la remodelación del parque principal “La Libertad” de Piedecuesta antes de llevar agua potable a sus ciudadanos; en un Concejo Municipal serio donde se haga un control político real, debería llamarse a “Moción de Censura” a los funcionarios responsables de esta tragedia social, económico y de salud pública. Ojalá prontamente se restablezca el suministro del agua potable por el bienestar de todos y ojalá que la desidia del alcalde no acabe con el patrimonio público de los Piedecuestanos. @ELDENUNCIANTEo Twitter-Fredy Garzón