Por: Gustavo Rugeles – Director de El Expediente
Publicado el 24 de octubre de 2025
La Paradoja: El Derecho como Arma de Doble Filo
En otro país sería un titular exótico. En Colombia, es la autopsia de una crisis institucional: el presidente sancionado por Estados Unidos tiene un equipo de abogados que, para ejercer su defensa, debe evitar violar las leyes del mismo país que lo sancionó.
El caso Petro ya no es un litigio. Es una operación de cumplimiento donde el cliente es el riesgo.
Los abogados defensores se enfrentan a una paradoja letal: sus herramientas de trabajo — el correo electrónico, la transferencia bancaria, el servidor en la nube — se han convertido en la infraestructura de su propio delito potencial.
👩⚖️ El Anillo Jurídico en Territorio Hostil
• Mauricio Pava Lugo: El estratega jurídico principal, ficha de Ivan Cepeda
• Alejandro Carranza: El enlace político-jurídico.
• Julio César Ortíz Caballero: El constitucionalista y bisagra oculta en la rama judicial
• Miguel Ángel del Río Malagón: El ariete mediático-penal.
Son el cinturón legal de Petro, pero ahora operan en “territorio enemigo”.
Su cliente es un SDN (Specially Designated National). En el mundo del compliance, el riesgo es contagioso.
Cualquier asesoría, pago u honorario que toque una frontera digital — una cuenta de PayPal, una transferencia SWIFT, un reembolso en USD, o incluso un pago en EUR que pase por un corresponsal en Nueva York — es una violación potencial.
La Trampa de la “Excepción Legal”
En Washington, el problema no es la defensa jurídica: es la defensa que se paga.
El reglamento OFAC (31 CFR Part 599) y la ley IEEPA (50 U.S.C. §§ 1701–1708) prohíben proveer “servicios” a un designado. Existe una aparente “excepción de servicios legales”, pero no es un escudo: es una trampa de cumplimiento. Permite asesorar, pero regula ferozmente el pago.
Defender al presidente no es delito. Cobrarle sin una licencia específica de OFAC, sí lo es. El pago no puede venir de fondos bloqueados. Y si viene de fondos “limpios”, requiere una licencia del Tesoro que certifique esa limpieza. Cada factura es una solicitud de permiso a Washington.
Los Dos Frentes de Riesgo Letal
- El Pago: El Dinero Radiactivo.
Si cualquier abogado del equipo recibe honorarios — incluso en pesos colombianos — desde cuentas oficiales de la Presidencia que ahora son “propiedad” de un SDN, se activa la prohibición.
El banco local, por SARLAFT y riesgo de corresponsalía, está obligado a congelar ese pago y reportarlo a la UIAF y a la OFAC. El abogado que intenta cobrar queda marcado.
- La Interacción: El Email como Delito.
El riesgo más crudo no es el dinero, es el software.
• Revisar un borrador de decreto en Google Drive o Microsoft 365 (servidores de U.S. Persons).
• Enviar un email de estrategia al cliente usando Gmail o Outlook.
• Guardar archivos del caso en iCloud o Dropbox.
Todo esto es, técnicamente, “proveer servicios y tecnología” de EE. UU. para el beneficio de un SDN.
Es una violación directa de la IEEPA.
Y si la defensa toca contratos de defensa o tecnología (aviones, drones, software de inteligencia), los abogados entran en el radar penal de ITAR y EAR, donde las multas son millonarias y el riesgo de cárcel es real.
El Factor Kovalik: La Mira sobre el Equipo Local
Desde que Petro mencionó a Dan Kovalik como su abogado en EE. UU., el Tesoro puso en observación a todo el equipo local. OFAC no ve “abogados”; ve una red de apoyo (support network) de un SDN.
Kovalik sabe que no puede cobrar sin licencia. ¿Lo saben Pava, Ortíz, Carranza y Del Río?
La lógica de OFAC es simple: quien mantiene flujos activos o comunicaciones operativas con un SDN entra en el screening automático.
Conclusión: La Defensa como Fuego Cruzado
El anillo jurídico de Petro ya no litiga: camina sobre una mina regulatoria.
Su campo de batalla no es el Palacio de Justicia. Es la red SWIFT y los servidores de Microsoft y Google donde reposan sus comunicaciones.
Cada correo, cada pago, cada archivo .docx puede ser leído por el Tesoro como un acto de “facilitación material”. Y en la gramática de la OFAC, no hay sinónimos: “apoyar” es “participar.”
La historia de Colombia ya tiene su primera sanción presidencial. Falta ver si también tendrá su primera designación de abogados por el delito de haberlo defendido.
EL EXPEDIENTE SIGUE LA PISTA
Próxima entrega: los flujos de fondos de defensa y consultorías ligadas a la Presidencia que ya cruzan la línea de riesgo OFAC.
En la guerra financiera de Washington, ni siquiera los defensores tienen inmunidad.




