Por: Fernando Torres Mejia
“Cuando un periódico pierde su credibilidad desaparece su prestigio y se destroza el respeto que la opinión publica pueda tener sobre sus opiniones y sus informaciones”: Guillermo Cano
En Colombia se estiman 10.990.268 de jóvenes entre los 14 a los 26 años es decir, que representan el 21,8% del total de la población del país, y empiezo con este dato, por que muy seguramente a la gran mayoría de jóvenes no les gusta leer y de historia menos, es una lastima por que muchos no tienen ni idea de quien era uno de los grandes “maestros” , respetado y connotado periodista, periodista de verdad, de esos que ya DIFICILMENTE encontramos en nuestra querida y compleja Colombia, por que para nadie es un secreto, que ahora con la llegada de las redes sociales, todos nos volvimos periodistas, todos los que tenemos un computador con conexión a internet o un dispositivo inteligente, lanzamos imágenes, comentarios, noticias en algunos casos de manera IRRESPONSABLE, otros por crear caos, otros por que les fascina especular, o en otros casos, movidos por la angustia, el estrés, o simplemente por que queremos ser los primeros en lanzar “LO ULTIMO” al mejor estilo de un noticiero o cualquier medio de comunicación tradicional.
Hoy El Espectador el otrora medio de comunicación admirado y respetado como uno de los mas leídos y consultados por todos los colombianos, viene cayendo en picada libre, perdió objetividad, carisma, credibilidad y lo mas grave, el respeto y la confianza de sus lectores y por supuesto sus detractores, algo parecido, a lo que hasta finales del año 2020, le sucedía a la Revista Semana, también una de las mejores o tal vez la mejor publicación con la que contaba en país, pero su falta de independencia, la llevo a una crisis similar a la que hoy afronta este diario, por lo que sus nuevos propietarios tuvieron que hacer cambios drásticos y necesarios para lograr recuperar su rumbo, para lo cual fue necesario cambiar a sus directivas y por ende la gran mayoría de sus columnistas y colabores
Pero además de la perdida de objetividad, coherencia y credibilidad, EL Espectador bajo la dirección de Fidel Cano, en su afán de recuperar un “poco” del espacio perdido, en momentos donde se requiere y se espera información responsable y veras, por la zozobra en la que estamos viviendo, continua con sus desaciertos al publicar noticias falsas o como dirían otros FAKE NEWS, tanto así, que su propio director tuvo que salir a decir en un corto video, que por cierto, trata de minimizar los efectos de esta irresponsabilidad y comento “En las redacciones estamos al borde de un ataque de nervios, tratando de informar de la manera más fiel y cercana a la realidad en medio de la confusión, de las carreras y presiones de las redes sociales. Esta semana hubo dos errores complejos que resultaron incendiarios. En la primera, ante la gravedad de la denuncia de violencia sexual de una menor de edad en Popayán, nos apresuramos a dictar una sentencia. También nos pasamos de revoluciones con la indignación y titulamos “Policías sacaron de un parque a joven deportista, por pedido de ‘gente de bien’”, no señores no se puede ser tan irresponsables y atacar a una de las instituciones mas queridas de nuestro país, donde en su filas, también hay un numero importante de jóvenes que con este tipo de publicaciones, se están ganando el odio infundado por estos errores, si no tienen la capacidad de indagar y estar seguros antes de publicar, no contribuyan a la polarización, ni mucho menos a incendiar el país, a no ser y como lo comenta el twittero @Melquisedec70, en uno de sus twitt a raíz de otra desafortunada publicación de este diario “Mayoras y mayores” acabo de leer en una nota de @elespectador, Quien dicto ese texto, Maduro? Ya leeremos “periodisto y periodista “, “jóvenes y jovenas”, “millones y millonas” , muy triste el final a que están conduciendo este diario, por que los que tuvimos la oportunidad de conocer el talante de don Guillermo, sabemos que hoy debe estar revolcándose en su tumba al “conocer” este tipo de publicaciones “EL ESPECTADOR” DE DON GUILLERMO CANO Y LAS FAKE NEWS EN PLENO PARO NACIONAL