Por: Laura Pinzón
Cuando uno cree que los criminales no pueden ser más cínicos, aparece Tanja Anne Marie Nijmeijer presumiendo su título de maestría en ‘Interculturalidad, Desarrollo y Paz Territorial’ de la Universidad Javeriana, pero no recordando su “doctorado” como guerrillera. Y, es que hasta se atrevió a compararse con una ciudadana que jamás ha pasado por las filas de un grupo armado, el que es… Definitivamente no deja de ser.
Si alias “la holandesa” o, Alexandra Nariño (porque así era conocida entre las filas de las Farc) quería que habláramos de ella pues hay que contar también su procedencia y la falta de reconocimiento a su participación activa en dicho grupo terrorista que, gracias a la firma del Acuerdo de la Habana, pudo lavarse las manos de sus responsabilidades delincuenciales.
¿Cuál era su trabajo en el secretariado de las Farc? Mejor les comparto textualmente la descripción que ella hizo del mismo en una entrevista: “Yo era demasiado fresca, me decían: ‘Usted tenga en cuenta que por lo que estamos haciendo nos pueden meter no sé cuántos años de cárcel. A mí no me corría brisas; ese trabajo implicaba colocar bombas, quemar Transmilenios, buses, empresas de busetas, ese era el trabajo que hacíamos. No tenemos nada que esconder, no somos hermanitas de la caridad”.
Ahora la pregunta es, ¿Cuál será su nuevo trabajo desde la vida fuera del monte? Lo que se intuye de principio por el título de la maestría es que (para su caso y con sus antecedentes), seguirá defendiendo a partir de la lucha ideológica, social y hasta política a las Farc, posiblemente ufanándose como líder social para llevar la engañosa bandera de la igualdad, derechos humanos y liberalismo que tanto encanta a los ciudadanos que padecen de ceguera histórica y moral.
Celebraré el hecho de que los guerrilleros dejen las armas el día que se les haga pagar por sus crímenes porque de inicio por ejemplo, es una injusticia lo que Santos decidió brindarle “a los colombianos” en su Acuerdo, la posibilidad de estudio para los guerrilleros que asesinaron, torturaron, violaron y secuestraron a sus compatriotas sin un día de cárcel y, en cambio para todos los ciudadanos honrados y correctos, ni siquiera el planteamiento de leyes que les permita estudiar en prestigiosos claustros a bajo costo o gratis, como a alias “la holandesa”.