Por: Duván Idarraga
En columnas anteriores he mencionado la preocupación que me asistía sobre el comportamiento de la economía del país a partir de los resultados del último trimestre del año 2022 y el primer trimestre del 2023. Respecto al primer lapso, mencioné la inquietudpor la tendencia que marcaba el decrecimiento del último trimestre del 2022 del sector comercio (bastante inferior al mismo lapso de 2021) y su resultado a la baja en el primer trimestre del 2023.Expresaba que esa tendencia se podría mantener en el resto de 2023, tal como se corroboró con la cifra del segundo trimestre (este sector decreció 3 puntos porcentuales).
Igualmente mencioné que el resultado del crecimiento del PIB del primer trimestre del 2023 del 3%, no solo estaba muy por debajo del resultado de igual periodo del 2022 del 8,2% (cayó 63,41%), sino que acentuaba la tendencia a la baja en algunos sectores como construcción; comercio se mantuvo bajo. A la vez, había otras señales de alerta sobre lo que podría ser el desempeño de la economía del país en el resto del año,a partir de los registros ya mencionados y de otros,como la caída de exportaciones del país a abril de 2023 del 31,5% versus abril de 2022, o la caída del 11.58% en el acumulado enero abril de 2023 versus igual periodo de 2022.
Hace pocos días conocimos el resultado publicado por el DANE respecto al crecimiento del Producto Interno Bruto PIB en el segundo trimestre del 2023; un resultado muy inferior a lo que se esperaba, con un crecimiento de solo 0,3%, muy por debajo al crecimiento del 12.2% de igual período del 2023 (cae un 97,54 %). Este resultado genera grandes inquietudes, ratifica el decrecimiento que se vienedando en diferentes sectores claves de la economía(como construcción y comercio) y vislumbra graves consecuencias para el país en el corto y mediano plazo.
Por sectores de la economía, estos son los resultados del segundo trimestre de 2023, comparados con igual periodo de 2022:
• Agricultura decrece 1.4 puntos porcentuales
• Explotación de minas crece 3.8 puntos porcentuales
• Industria manufacturera decrece 4 puntos porcentuales
• Construcción decrece 3.7 puntos porcentuales
• Comercio al por mayor y al por menor decrece 3.2 puntos porcentuales
• Información y comunicaciones crece 1.1 puntos porcentuales
• Actividades financieras y de seguros crece 3.7 puntos porcentuales
• Actividades inmobiliarias crece 1.8 puntos porcentuales
• Actividades profesionales científicas decrece 0.2puntos porcentuales
• Administración pública crece 4.5 puntos porcentuales
• Actividades artísticas crece 12.2 puntos porcentuales
Reitero lo expresado en columnas anteriores, respecto al mayor impacto sobre la economía del país que tienen los sectores construcción y ventas al por menor.Como podemos observar, sus resultados del segundo trimestre del 2023 son muy inferiores a igual periodo del 2022; reafirman su tendencia a la baja desde el último trimestre de 2022, prácticamente complementan tres trimestres con bajos resultados que generan grandes inconvenientes en el mediano y en el largo plazo, tanto en generación de empleo como aporte al crecimiento.
Por otro lado, igualmente preocupa de manera importante que se reafirme la tendencia de decrecimiento del primer trimestre en nuestra economía y se vislumbran muy bajas expectativas para los dos trimestres que restan del año. Peor aun, no hay elementos que permitan generar confianza de que se puedan revertir estos resultados. Podemos afirmar quemuy difícilmente se puede lograr la expectativa de crecimiento para la economía del país definida por el banco de la República del 1.5%, muy baja en sí. Es más, es altamente probable que tengamos un resultado negativo como los de pandemia, con el agravante que esas circunstancias fueron un evento mundial y con plenas justificaciones que hoy no existen.
Por otro lado, me reafirmo en mi preocupaciónexpresada en la columna anterior, a partir de estos resultados tan inquietantes del bajísimo crecimiento del Producto Interno Bruto, sobre lo que puedenrepercutir en las finanzas públicas del Estado. Es altamente probable que los balances financieros de las empresas (los grandes y mayores contribuyentes del país en impuesto de renta) se verán seriamente afectados en el año 2023 (difícilmente van a alcanzar los resultados de utilidades de los años 2021 y 2022)y, por ende, el recaudo de impuestos va a caer de manera considerable en el 2024. Si a eso sumamos el crecimiento desproporcionado e injustificado en el gasto del gobierno Petro, en su presupuesto de 2023 y proyecto del mismo para 2024, el panorama fiscal y de finanzas públicas nacionales resulta bastante inquietante. Es un tema de alto impacto para el paísque el gobierno actual prefiere no mencionar e incluso ocultar con cifras muy cuestionables.
Por último, me reafirmo en que lo que más inquieta es que no se observa por parte del gobierno actual el interés de buscar consensos con el sector productivo del país para impulsar la economía, tal como se hizo en los años 2020 y 2021 en plena pandemia cuando se logró un esfuerzo mancomunado entre Gobierno y Empresarios que permitió que los resultados del país fueran los ya conocidos en esos lapsos; incluso, es mas grave, no solo se mantiene el mensaje del gobierno Petro en contra de los empresarios, ni siquiera asistió a la Asamblea Nacional de la ANDI (Asociación Nacional de Industriales) celebrada hace pocos días en Cartagena.
En conclusión, es claro que los resultados del Producto Interno Bruto PIB del país del segundo trimestre de 2023 son muy deficientes; hay enormes inquietudes para lo que resta del año, con escasas posibilidades de revertir la tendencia. Es altamente seguro queterminará siendo un año muy complejo para la economía del país, mucho más difícil de lo esperado,con las consecuencias que conlleva. Sigo pensando que, en materia fiscal al final de 2023 y en 2024, el déficit fiscal será mucho mayor que el proyectado por el gobierno en el Marco Fiscal de Mediano Plazo con las graves consecuencias de ello.
Nota: Llama la atención que pese a los resultados deficientes en varios sectores de la economía y en especial los intensamente intensivos en mano de obra (construcción, comercio e industria), se haya mostrado por parte del gobierno un decrecimiento significativoen el desempleo. Según las cifras que han entregado,en el último año se han creado 1.030.000 empleos, de los cuales el 98,3% son formales. No encuentro congruencia ni consistencia en esas cifras y las del PIB. ¿Se habrán afiliado 1.012.490 nuevas personas al Sistema de Seguridad Social del país en ese lapso?