La exministra de Educación Gina Parody, que se encuentra fuera del país para evitar cumplir con los requerimientos judiciales por su participación en la adición de la vía Ocaña Gamarra que beneficia directamente los negocios de su familia y que es el epicentro de la investigación por los sobornos de Odebrecht en Colombia, enfrenta otro revés que evidencia los desaciertos de sus decisiones al frente de la cartera de educación: la intervención de la Fundación Universitaria San Martín, en su momento, uno de los más sonados y promocionados resultados durante su paso por el gobierno Santos.
El paso del tiempo ha permitido ver otra realidad. Dos años después de la decisión de Parody la situación de la universidad no ha mejorado y persisten los malos manejos que tienen las finanzas y la estabilidad académica, institucional y jurídica de la universidad en un estado critico.
A comienzos de 2015 Parody acusó a su dueño de la fundación, Mariano Alvear, de desviar los recursos de las matriculas para sus negocios particulares entre ellos la ganadería Cibre, la marca de carnes Qualite y los restaurantes Burger Market.
El Ministerio de Educación puso en marcha con una serie de medidas administrativas aceleradas como fue la suspensión de los registros académicos de la universidad hasta que con el concurso del las entidades del Estado y del entonces vicefiscal Jorge Perdomo, logró la judicialización de los dueños de la universidad.
En febrero 2015 Parody se quedó con las riendas de la institución fundada hace 30 años como un instituto de bachillerato, administración y contaduría bajo el nombre de IBAG y que alcanzó a albergar a más de 20 mil estudiantes en sus sedes en distintas ciudades del país.
Parody quería tomar el control de la universidad y del jugoso negocio que representaba. Destituyó a las directivas conformadas por Mariano Alvear, Martín Alvear, Xiani Ocampo y Antonio Sofán para tener total manejo designó a tres personas de su entera confianza en el nuevo esquema directivo: Edna Bonilla Sebá, profesora de la Universidad Nacional, Ángela Echeverry Arcila, exdecana del Medio Universitario de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Javeriana y al profesor de los Andes Roberto Zarama quien fue el creador de su programa bandera en el Ministerio, Ser Pilo Paga.
De los tres integrantes del nuevo Concejo académico el más cercano a Gina Parody terminó sacando ventaja: Roberto Zarama terminó impulsado por la vice ministra Natalia Ariza para sumir la presidencia del plenum haciendo las veces de dueño de la universidad en medio de las protestas de los estudiantes y la comunidad académica en general. Una movida de ‘yo con yo’ que no cayó bien y derivó en duras criticas a sus decisiones y al manejo financiero que ha mantenido bajo total reserva, sin rendir cuentas a profesores y estudiantes.
Luego de dos años de intervención las cosas andan peor en la universidad y los estudiantes, docentes y personal administrativo, se revelaron y ahora quiere luchar por recuperar la posibilidad de tomar decisiones y tener injerencia en el manejo de la universidad.
Estudiantes que han invertido sus ahorros en sus carreras, docentes, personal administrativo con años prestando sus servicios y algunos padres de familia, se cansaron de ser marginados de las decisiones y se agruparon al rededor de la Asociación Nacional Académica Sanmartiniana (ASONÁS) que preside el estudiante de medicina veterinaria de zootecnia Cristian Alberto Sánchez quien ha liderado la protesta por los derechos de los alumnos y trabajadores de la universidad.
Cristian Sánchez fue la persona que se amarró a un sexto piso de la universidad buscando la atención del gobierno nacional frente a sus reclamos para que se les respondiera a los estudiantes que estaban viendo afectado su calendario académico y perdiendo el dinero de sus matriculas y semestres. También ha pedido que se cumpla con el pago de salarios y pensiones atrasadas a los docentes y ahora lidera la asociación con la que quieren sacar a la luz todos los manejos irregulares que tienen documentados y que comprometen a las personas que la ex ministra Parody puso para apoderarse de la Universidad San Martín.