Sobre el caso del Ñeñe Hernández:
El ejercicio político del presidente Duque ha sido transparente. En mi larga carrera política jamás ha pasado por mi mente comprar votos, he sido riguroso desde mi primera elección como concejal en 1974, le he contado al país en innumerables ocasiones quiénes han sido los gerentes de mis campañas, personas de la más alta reputación, dineros de origen transparente, todos declarados además del cuidado de poner magníficos gerentes al frente de las campañas -nunca he manejado los dineros de las campañas- con la garantía de la reputación moral de los gerentes, siempre se ha delegado en ellos y estoy refiriéndome a una carrera política cuya primera elección sobre mi persona fue en 1974.
El tema del Ñeñe Hernández: Yo al señor no lo conocí, no fui amigo de él, aparece en una foto conmigo como hay fotos de miles de colombianos que todavía se atreven a tomarse una foto conmigo en actos públicos. El señor, me cuentan los amigos de Valledupar, que hasta que se murió, siempre se habló de él como ganadero exitoso, nunca como un narcotraficante. La acusación de narcotráfico empieza a darse después de la muerte del señor Hernández.
Ahora, si hubo personas inescrupulosas abusando del nombre de personas, del presidente de la República, de mi nombre, para pedir dinero y cometer crímenes-delitos durante el proceso electoral, que esto lo sepa el país.
A mi me parece de la mayor importancia hacer un emplazamiento para que quede absoluta claridad de quiénes son los interlocutores en esas grabaciones que ahora están saliendo al aire.