LAS SUCIAS ALIANZAS DE PETRO

Por: Fredy Garzón – El Denunciante

En el 2022 se cumplen 20 años de uno de los episodios más indignantes y dramáticos ocurridos en Colombia; la “Operación Orión” llevada a cabo el 16 de octubre de 2002 mientras Luis Pérez Gutiérrez era alcalde de Medellín.

Según el Centro Nacional de Memoria Histórica, este operativo en la Comuna 13 dejó más de 4 mil desplazados, miles de muertos y heridos que todavía no se han podido realmente cuantificar; “La Escombrera” una gran montaña que tenía un nacimiento de agua después de esta fatal operación, se considera una de las fosas urbanas más grandes del mundo.

De acuerdo a las declaraciones del exjefe paramilitar “Don Berna”, esta operación que se extendió por aproximadamente un mes, contó con la ayuda del “Bloque Cacique Nutibara” y vergonzosamente con un corrompido sector de nuestra fuerza pública.

Hoy el precandidato presidencial Gustavo Petro, nos sorprende de nuevo, y sólo con el propósito de admitir el ingreso al “Pacto Histórico” de Luis Pérez Gutiérrez, exgobernador de Antioquia y exalcalde de Medellín mientras se realizó la “Operación Orión”; justifica esta masacre.

El afán desmedido de Petro por llegar a la presidencia y de no tener alianzas, lo lleva hasta pactar con los demonios con los que antes no comulgaba y hoy les lava la cara.

Se atrevió a comparar en términos de seguridad la “Operación Orión” con los hechos del 9 y 10 de septiembre del 2020 en medio las “Protestas Sociales” de Bogotá, donde murieron 10 personas y resultaron herida 500 más.

Para el dirigente de la “Colombia Humana” en estos dos sucesos que no se deben comparar, la seguridad es pensada como seguridad para el Estado y con un enemigo interno que residía dentro de la ciudadanía; un sapo que sólo se pueden tragar los líderes y bases ignorantes del “Pacto Histórico”.

Mientras Claudia López es llevada a los sótanos del infierno por Petro, Luis Pérez Gutiérrez pasa por el “Purgatorio” de la izquierda celestial para la limpia expiatoria de sus pecados mortales, por donde ya pasaron los manzanillos de Benedetti, Roy Barreras, el pastor misógino Alfredo Saade y las FARC pedófilas y asesinas.

No es precisamente la coherencia del discurso progresista que une al Pacto de la extrema izquierda en Colombia, es la autocracia del pequeño burgués de los ferragamo, de las mansiones en Chía y de las bolsas de dinero.

“El que muestra el hambre no come” y lo que Petro no obtuvo con la fuerza de las armas, tampoco lo logrará con el afán desmedido de sus sucias alianzas en medio de su incertidumbre de quedarse en soledad con su arrogancia.

Fredy Garzón
@ELDENUNCIANTEo
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