Por: Carlos Cuartas Quiceno – El Expediente
En sus orígenes la derecha buscaba mantener el estatus quo, algo así como el que consiguió salir adelante o pertenecer a alguna familia con posibilidades, de esta manera debería quedar. Aun no existe un partido de derecha lo suficientemente fuerte que pueda representar esta inclinación, exceptuando el re-naciente partido de Salvación Nacional el cual deberá fortalecerse y crecer para representar esta tendencia política en Colombia.
Hoy la nueva derecha, esa que representa Salvación Nacional, busca mantener las libertades económicas de la mano de la creación de oportunidades para todos, desde el crecimiento económico, atrayendo inversión extranjera, compañías de primer nivel, creando un ecosistema de innovación y tecnología para insertarnos en la nueva economía, dejando solo el extractivismo como proveedor de recursos y materias primas necesarias en las cadenas productivas.
La derecha no genera subsidios económicos NO condicionados, es decir solo se acude a ellos en situaciones específicas, por un tiempo definido en lo que subsista esa circunstancia que tiene pasando por un mal momento a un hermano colombiano.
Bien sea para fortalecer una cadena productiva necesaria o una estrategia de seguridad alimenticia y crecimiento como sucede con el agro, no solo en nuestro país sino en el mundo, donde los países inteligentes y prósperos saben de la necesidad de mantenerla, también apoyando los sistemas de transporte masivos deficitarios pero indispensables para que la población pueda llegar a sus sitios de trabajo y continuar el crecimiento necesario para todos.
El subsidio al que nos han acostumbrado nuestros gobernantes desde hace más de 30 años, es más fuerte aún desde la constitución del 91, es el culmen del fracaso de las políticas en los gobiernos de izquierda o de enfoque social y de bienestar que han dirigido a Colombia en los últimos años, un estado viable es aquel que logra darle oportunidades a sus ciudadanos para que crezcan al ritmo que su inteligencia, capacidades y ganas, siendo el infinito su límite.
Así mismo, la nueva derecha debe quitar los privilegios que han venido acumulando algunos sectores en detrimento de las finanzas, que podrían ser invertidas en apoyar el emprendimiento y los productos que nos permitan generar una seguridad alimenticia para todos los ciudadanos y además apertrecharse para momentos de turbulencia como los que vivimos hoy en día por la crisis que dejó la pandemia y las políticas que se viven en Ucrania y Taiwán.
La nueva derecha, esta derecha moderna busca la seguridad en todos los ámbitos, no solo la seguridad física que todos merecemos para salir tranquilos a las calles, sino la jurídica que atrae inversión, la energética que es motor del aparato productivo, la seguridad alimenticia que mencioné anteriormente, la seguridad judicial, que permite que la sociedad crea en sus instituciones.
En Colombia la derecha hasta hoy, no ha sido un partido ni una tendencia política sino un modo de vida, son las personas que se dedican a trabajar porque tuvieron la oportunidad de estudiar, acceder a créditos, de ser empresarios o poseer tierras y disfrutar de todo lo bueno que eso trae, pues se tiene acceso a momentos de esparcimiento, viajes, vestidos, etc.
Algo que no está mal, todo lo contrario, es el sueño de la mayoría de personas, subir poco a poco su nivel de vida y el de sus familias. Pero esa comodidad que posee una parte de la sociedad colombiana, donde se quedaron disfrutando de las oportunidades que si tuvieron y no se interesaron ni en la política, ni en ver como aportaban para que la otra parte de los colombianos, de regiones apartadas tuvieran la misma suerte.
Aunque para eso se supone están nuestros dirigentes, ahí es precisamente donde nace Salvación Nacional y su importancia en estos momentos históricos del país. Los subsidios NO condicionados son finitos, en algún momento se agotan y no cambian la condición primaria por la que ese ciudadano tuvo que recurrir a este.
Los subsidios deben ir dirigidos como lo vimos anteriormente para crear, capacitar, producir con eficiencia, competir con nuestros productos en el exterior y darle oportunidades a los menos favorecidos, a los que nacieron sin el “privilegio” de tener una buena educación, atención en salud y alimentación.
Llegó la pandemia y nos encontró sin muchos recursos a pesar de venir de unas pequeñas bonanzas debido al alto precio de los commodities, pues ese dinero lo usamos en subsidios monetarios NO condicionados y los resultados los conocemos hoy.
La nueva derecha tiene la verdadera capacidad de asegurar el crecimiento económico en la sociedad y puede garantizarlo en las personas que así lo quieran, al mismo tiempo aquellos que no están dentro de ese alcance puedan llegar a ese punto de equilibrio otorgándoles los beneficios básicos como son la salud, educación y empleo, que sería una población mínima debido al desarrollo permanente y que realmente si requiere de un subsidio, no como sucede hoy en día que graduamos incapaces a la mitad de la población colombiana.
Adicionalmente, para que las cosas funcionen debemos volver a creer en los valores y regresar a la base de una sociedad con pilares que la mantengan firme, como son la familia, la libertad, autoridad, justicia, orden, emprendimiento y seguridad.
Carlos Cuartas Quiceno Emprendedor, Empresario, Ex candidato Vicepresidencia de la Republica.