Mientras el uribismo casi en pleno, las bases, la bancada parlamentaria del Centro Democrático, los dirigentes regionales no pueden ocultar el desconcierto por las confusas decisiones del gobierno en sus primeros 100 días el Presidente Iván Duque solo recibe aplausos de dirigentes afectos al santismo y a la izquierda. Respaldo de Martín Santos por su gabinete; de Gabriel Silva por su ecuanimidad, de la gran prensa que lo ensalza con generosas portadas y de las personas que apoyaron el Acuerdo de paz pero que perdieron en las urnas el plebiscito y las elecciones presidenciales.
El arranque estrepitoso dejó varios hechos que demuestran que el Presidente Duque ha actuado de manera contraria a la voluntad de sus electores y de sus promesas en campaña.
Desde el 7 de agosto comenzó a marcar distancia. Mientras el Presidente del Congreso Ernesto Macías pedía un corte de cuentas el Presidente Duque ya comenzaba a nombrar en su gabinete a personas cercanas al santismo. Ministros, viceministros y funcionarios ratificados en altos cargos. Esto mientras que el Centro Democrático, salvo algunas representaciones diplomáticas, se quedó con una marginal participación en el gobierno.
Muy pronto el Presidente Duque comenzó a dejar claro que iba por su lado. Mientras el expresidente Uribe pidió no apoyar la Consulta Anticorrupción –que como se advirtió fue utilizada cono plataforma política de la campaña de Claudia López- el presidente Duque le dio publicidad y le metió toda la ficha. Los siete millones de votos son un capital para la alcaldía de Claudia López que juegan en contra de los intereses del Centro Democrático que arranca desde cero con su candidato Samuel Hoyos.
El presidente también está tomando trascendentales decisiones en dirección contraria a su plan de gobierno expuesto en campaña. En distintas oportunidades criticó el alza del IVA y prometió no subir, sino incluso bajar los impuestos.
Pero por el contrario el Presidente respaldó con un alto costo político a su ministro Alberto Carrasquilla, con notables conflictos de interés, y lo acompañó en una radical ley de financiamiento que toca el bolsillo y la nevera a los colombianos que tendrían que asumir el hueco fiscal que dejó el anterior gobierno. El presidente ha rehusado hacer un necesario corte de cuentas.
En campaña Duque fue feroz crítico de la impunidad de las FARC y pidió que la Corte Penal Internacional actuara frente a la grave violación de del derecho internacional humanitario por parte de las FARC. Pero ayer en Francia durante un foro organizado por el Paris Peace Forum para conmemorar los 100 años del fin de la primera guerra mundial el Presidente Duque cambió de discurso nuevamente: ‘El acuerdo de paz entre el gobierno de Colombia y las FARC cumple con el Estatuto de Roma y está en el marco de la Corte Penal Internacional CPI’
En campaña Iván Duque también pidió celeridad en la extradición de Jesús Santrich. Ya en el gobierno le ha dado vueltas al asunto sin actuar frente a la solicitud vigente del gobierno de Estados Unidos, dándole alas a la JEP que intenta frenar la acción de la Fiscalía y de las autoridades americanas
El expresidente Uribe es prudente. Se ha opuesto al aumento del Iva y a otros aspectos del gobierno pero sabe que difícilmente sus electores entenderían que se equivocó nuevamente.